Cuéntame una historia - 22 de agosto de 2023

Invito a mis siguientes amigos a participar en este concurso.

@wandrnrose7,
@pjpavan
@sacra97

Mientras Ribeiro se cambiaba de ropa y caminaba hacia el aparcamiento de bicicletas para recoger su bicicleta para volver a casa después de su deber, sintió algo extraño.

Hoy no se sentía muy bien. Oleadas de dolor subían por su cabeza. Incluso estando de servicio, se había quejado de esto ante muchos empleados que trabajaban con él.

Cuando avanzó un poco, volvió a sentir que alguien lo había sacudido poniendo una mano en su hombro. Pero considerando esto también como la razón de su dolor de cabeza y debilidad, llegó al soporte y vio que el aire en la rueda de su bicicleta estaba desinflado. Ahora su cabeza empezó a estallar de dolor.

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Pidió al empleado que estaba allí que llenara de aire la rueda de su bicicleta. Después de llenarlo de aire, llegó a casa montado en él con dificultad, y tan pronto como llegó a casa, se desmayó y cayó.

Linda, la esposa de Ribeiro, lo vio caer, así que vino corriendo y, con la ayuda de su vecina, lo levantó y lo llevó adentro hasta la cama. La vecina de Linda quedó sorprendida por el mal olor que emanaba el cuerpo de Ribeiro, le pidió a Linda que llevara a su marido a un exorcista, su cuerpo olía a espíritus malignos.

Sé que si le preguntas a un exorcista, lo llamaré. Linda inmediatamente estuvo de acuerdo, en poco tiempo llegó un exorcista de la comunidad del sur y apenas llegó dijo que esta persona está poseída por un espíritu maligno, ustedes dos siéntense un poco lejos, yo lo curaré.

Luego encendió allí mirra fragante y sacó dos plumas de guacamayo de color azul y dorado de su bolso y comenzó a murmurar algo mientras cantaba mantras. Después de hacer todo esto durante 15 minutos, dijo, ahora no hay por qué tener miedo.

Esta curado, en cuanto recupere la consciencia báñalo con un poco de agua fría y dale algo de comer y también dale café instantáneo caliente, por la noche estará completamente sano.

Linda asintió con la cabeza y preguntó cuántos honorarios tienes que pagar. Ojha dijo que no hacemos este trabajo para ganar honorarios, es un poder que nos ha dado Dios y que distribuimos sin costo alguno.

Linda lo miró agradecida y se despidió.

[Esto está traducido al español por Google Translate]